Nombrado de 1762 a 1773 – 11 años- administrador provincial de los diezmos de la iglesia , llegó a convertirse en uno de los mas importantes recolectores de diezmos de la nueva España . Para agilizar el manejo de los diezmos José Miguel organizo la creación de caravanas de carretas tiradas por mulas y bueyes , y mientras recolectaba en ellas “los diezmos” , aprovechaba también de transportar las mercancías de sus tiendas.
Cuando en 1777 el padre Agustín Morfi paso por Monclova Coahuila en la época colonial pudo advertir que aunque en el curato de Monclova solo se recaudaban 2000 pesos anuales, esa suma no servia de nada para pagar los gastos de manutención del sacerdote José Miguel, quien para entonces había hecho ya una fortuna de 80 000 pesos con la administración de los diezmos, y eso quitando alguno que otro robo que los indios hacían a sus carretas.
José Miguel recibía por colectar los diezmos un 8 % de comisión , pero duplicaba con creces el valor de los diezmos cuando estos se los pagaban “en especie” – ganado- , ya que luego este los vendía mucho mas caros de lo que los tomaba.
De hecho era la tienda del cura quien compraba a 4 reales , todas las borregas que se daban como diezmo , dinero que luego era mandado al obispado de Guadalajara, en esa forma para 1763 el cura Sánchez Navarro ya tenia 5 523 borregas. De hecho la tienda del cura crecía indirectamente gracias al Marquesado de Aguayo , ya que en 1760 el mayordomo de la hacienda del Carmen Francisco de Mata , hacienda perteneciente al latifundio del Marquesado de Aguayo, se abastecía de la tienda del cura , ya que le era mas practico hacerlo así , que mandar traer todo desde la hacienda de Patos, cerca de Saltillo . Lo mismo sucedía con los suministros de los soldados de la guarnición de monclova cuyas tropas y familias compraban todo en la tienda del cura y hasta se endeudaban con el cura cuando este les cobraba por hacerles algunos sacramentos.
Pasaban los años y el manejo del “diezmo” seguía enriqueciendo al cura José Miguel, sin embargo las autoridades eclesiásticas de Guadalajara estaban de acuerdo en que vendiera las borregas que se daban en pago del diezmo y les mandara a ellos solo el dinero. Ignoro si los altos prelados sabían que era el mismo cura quien se compraba las borregas.
Mientras los rebaños ovejas crecían José Miguel empezó a comprar muchas propiedades rurales , y para su administración mando traer de Saltillo a otro de sus hermanos Manuel Francisco a quien puso a cargo del naciente latifundio
Como el cura tenia entre sus obligaciones ver que sus feligreses compraran tierras a bajo costo , puso en subasta publica una enorme hacienda . Como era de esperarse el día de la subasta fue su hermano Manuel Francisco quien hizo la mayor propuesta dando 150 pesos por las escrituras de 5 578 hectáreas, con derecho a 10 días de agua de la confluencia de los ríos Nadadores y Monclova en el valle de Adjuntas.
Los Sánchez Navarro establecieron en esa hacienda su centro de operaciones y a partir de entonces empezaron a adquirir mas propiedades donde estas estuvieran disponibles.
Fue en 1772 que se le presento a José Miguel la oportunidad de su vida. El sobrino del cura que le había precedido , y que había heredado todas las tierras de su tío, acababa de morir , y había nombrado precisamente a José Miguel ejecutor de su herencia . Y como había que pagarle a algunos acreedores a quienes el sobrino debía algo de dinero– entre los que se encontraban el propio José Miguel Sánchez Navarro y su hermano José Gregorio el cura puso toda la propiedad de su antecesor en subasta publica para poder con ello cubrir las deudas .
Luego de unos días, un rival de los Sánchez Navarro hizo un ofrecimiento de 3 750 pesos , lo que hacia ver que la propiedad se les iría de las manos a los 3 hermanos Sánchez Navarro. El ultimo día de la prorroga José Gregorio Sánchez Navarro ofreció 100 pesos mas , y José Miguel ceremoniosamente se la cedió en febrero de 1773 . Para entonces los hermanos Sánchez Navarro ya tenían juntos 46 520 hectáreas y para 1774 a través de una compra de tierras a la corona española, la incrementaron con otras 17 377 , terreno suficiente para que pudieran pastar ahí sus enormes rebaños de ovejas.
En 1774 muere José Gregorio y su muerte marca el final de una era en el surgimiento del imperio de los Sánchez Navarro , pasando sus propiedades según testamento a sus 2 hermanos , conservando con ello el cura José Miguel la integridad de sus tierras
Luego de la muerte de José Gregorio , Manuel Francisco aumento la fortuna de los Sánchez Navarro al casarse con la hija de uno de los principales hacendados locales Juan Manuel de Palau quien se había establecido en el valle de Santa Rosa al casarse en 1745 con una hija de la prominente familia Garza Falcón, y a través de su esposa heredó la hacienda de nuestra señora de los dolores fundada por los Garza Falcón en 1745
Sus nuevas adquisiciones no distrajeron a Manuel Francisco de los negocios que tenía con su hermano José Miguel, de quien seguía siendo socio minoritario.
Fue en 1782 cuando Manuel Francisco heredo las 96 816 hectáreas de la hacienda de Dolores tras la muerte de su suegro Juan Manuel de Palau.
El cura José Miguel tenia entonces puesto el ojo en el rancho San Francisco Javier de la Escondida, y su oportunidad se presento en 1801 cuando el rancho fundado por el capellán de Santa Rosa fue hipotecado por un comerciante a quien se le debían 4581 pesos . Como los acreedores vivían en la ciudad de San Miguel el Grande , arreglaron que José Miguel cobrara por ellos , en lugar de ello, José Miguel les ofreció 450 pesos en efectivo si le cedían los derechos de acreedores , y así José Miguel añadió 44 619 hectáreas a su enorme latifundio que para 1805 ya media 298 991 hectáreas . Ese año murió Manuel Francisco y dejo a su hijo José Melchor de 23 años heredero de todas sus enormes propiedades rurales.